3/ A medida que los ayuntamientos recuperan parte del espacio para los peatones y usan normas relativamente genéricas pero con toques "made in tu casa", los conductores tienen que re-aprender a desplazarse por los entornos urbanos. Y cada uno es único. Algunos tienen calles peatonales, otras calles de solo residentes, algunas tienen zonas de bajo tráfico, en algunos países hay zonas de peajes urbanos, en otras el aparcamiento deja de estar subvencionado y toca pagarlo por horas, y ahora están desplegándose zonas de bajas emisiones. Pero se pueden usar todas combinadas con todas, y bajo parámetros muy localistas.
Esto hace que moverse en coche fuera de tu zona local se convierta en un campo de minas porque nunca estás del todo seguro de cumplir la normativa del municipio o el barrio de al lado. Los horarios de aparcamiento cambian de un ayuntamiento a otro, de un color de línea a otro, de festivos o no. Las ZBEs tienen calendarios relativamente complejos para los no-locales.